"Dejame ir"

"Déjame ir"

Autora: Sakura

Pareja: Yamachii

Genero: Yaoi

Exención: Oneshot

Nota: Holaa!! Bueno ahora les traigo un pequeño oneshot Yamachii  T___T pueden lanzarme tomates xD pero no en la cara, bueno antes que nada este fic es para una personita que quiero mucho mi oneechan Nina ^w^ hermosa! u///u espero no te haya decepcionado!! Sabes a la perfeccion que no se me da esta pareja!! T^T juro que trate de darle un digno final pero no pude xD mi coco dejo de dar ideas u bueno esto es lo que resulto, espero que te guste!! ^w^ y bueno para todos aquellos que lean si les gusto no estaría mal si me dejanun bello comenario de como salio en fin eso seria todo espero les guste-huye---

“Eres un egoísta, prometiste estar siempre a mi lado y no lo cumpliste... pequeño mentiroso.. Vuelve .., una vez mas.. te necesito..”

Sus lágrimas bajaban una vez mas, el dolor oprimía su pecho desgarrando su corazón, aquellas temblorosas manos sostenían las de su pequeño y frágil novio quien se encontraba en esa fría cama,  con los ojos cerrados como si estuviera durmiendo, esos fríos labios estaban resecos por los meses que llevaba en ese estado.

-Yuri... abre tus ojos.. por favor despierta..

Susurro recargando su cabeza en el pecho del menor sintiendo esa débil y pausada respiración, extrañaba esos cálidos brazos rodear su cintura, aquellos besos tan dulces, esa hermosa voz que le provocaba tanta felicidad en un solo día, lo extrañaba, y solo quería que regresara y que dijera todo estará bien.

-Yamada! debes ir a descansar llevas días desvelándote, puedes enfermar..

Dijo un chico que acababa de entrar mirando al menor quien estaba recostado sobre el pecho del pequeño con esas grandes ojeras, aquellas lagrimas que no paraban de brotar.

-No puedo dejarlo solo ... quiero estar cuando el despierte..

Susurro Yamada siendo perfectamente escuchado por aquel chico.

-Yamada sabes a la perfección que Chinen lleva 3 meses en coma, los doctores no dan muchas esperanzas.. es .. mejor que vallas aceptando que Chinen quizá jamás despierte.. y a el no le gustaría que estuvieras así por el.. quizá es hora de que lo dejes ir..

-Cállate Takaki!! no sabes lo que dices!! el va a despertar!! el.... lo hará..

Susurro Yamada esto ultimo con la voz quebrada, Yuya lo miro con tristeza, sabia a la perfección que el menor estaba sufriendo de la peor manera, el entendía a la perfección su dolor ya que el estaba en peores condiciones, el amaba al pequeño y el solo pensar que no volvería a verlo le destrozaba el corazón, este dolor era increíblemente desgarrador mucho peor que cuando lo perdió y lo dejo ser feliz al lado de Yamada.

-me aleje para que fueras feliz... y ahora estas en esa cama sin poderte mover..

Murmuro Yuya en voz baja, mirando aquel pequeño cuerpo, sus lágrimas comenzaron a bajar sin esperar mas salió nuevamente de esa habitación dejando a Yamada allí.

Yamada acaricio con sutileza aquel débil cuerpo, como es que ese pequeño que tan feliz lo había hecho no estuviera sonriendo como el solo sabia hacerlo, no podía creer ya no  volver a ver esos tiernos y bellos ojos mirándolo con dulzura, era algo que no deseaba imaginar y mucho menos lo podría soportar, pero como fue que Chinen llego hasta ese estado, todo había sido culpa suya por no haber podido cuidar al pequeño como debía, cerro ojos mientras vagos recuerdos llegaban a su mente.

-flashback-

Esa tarde era fría y lluviosa, ambos chicos caminaban tomados de la mano cubriéndose con una sombrilla, el menor sonreía con dulzura, mirando con ternura a su novio quien al sentir su mirada le devolvió la sonrisa abrazándolo con ternura.

-Chinen supe que antes de que aceptaras salir conmigo rechazaste a Takaki-kun.. Porque?

-Eh? .. Como lo supiste

-el me lo dijo, solo me pidió que te hiciera feliz, solo de esa forma el lo seria, me sentí de lo. Peor.. quizá hubiese sido mejor que estuvieras con el..

Chinen se detuvo girándose hacia Yamada y lo abrazo con dulzura.

-no digas eso, porque a quien amo es solo a ti.. yo me enamore de ti desde que nos conocimos, es verdad tuve miedo a expresar mis sentimientos, no quería que nuestra amistad se acabara.. pero cuando te me confesaste me sentí el chico mas feliz del mundo, es verdad Takaki se me había confesado un día antes.. ese día le iba a dar mi respuesta, lo iba aceptar para lograr olvidarte pero te me adelantaste así que mis planes cambiaron.. yo no quería lastimar a Yuya pero al parecer nos vio besándonos y no pude evitarlo…. sin en cambio creo que si el te dijo eso debemos hacerle caso no crees, así yo volviera a nacer una vez mas te escogería a ti..

Yamada sonrió abrazando con mas fuerza al pequeño, Chinen solo sonrió y correspondió de la misma forma.

-Gracias mi pequeño, no sabes lo feliz que soy a tu lado, nunca te alejes de mi por favor..

-no lo hare.. jamás me alejare de tu lado, no podre alejarme porque solo contigo soy feliz.

Yamada sonrió separándose un poco del cuerpo del menor tomando su rostro para besar sus labios suavemente el cual fue correspondido al instante, después de unos segundos se separaron con un leve sonrojo en sus mejillas, sonriéndose con ternura.

Pasaron todo el día juntos, jugando como niños pequeños en los charcos que se formaron por la lluvia la cual había parado.

-Chinen espérame aquí voy por un pastel del otro lado de la calle, no tardo.

Dijo Yamada mirando al pequeño, quien solo asintió mirando como el mayor cruzaba la calle.

Pronto comenzó a oscurecer, Chinen jugaba con su pequeño osito que el mayor le había comprado para el, sonriendo con ternura, se sentía inmensamente feliz al tener a Yamada a su lado, sin saber que esa misma noche su sueño acabaría.

-Ya tardo..

Susurro el menor haciendo un ligero puchero de pronto comenzaron. a caer gotitas de agua.

-de nuevo llueve- Miro al cielo formándose una sonrisa en sus labios-no es lluvia.. es nieve... esta nevando.. Yama-chan se pondrá feliz.

Susurro el menor para si mismo con una sonrisa, pronto dirigió su mirada al frente observando como el mayor venia alegremente comiendo su pastel.

-Yama-chan!! Ya viste que esta nevando!!

Grito el menor con una sonrisa, Yamada se detuvo mirando el cielo, de pronto un fuerte silbido se escucho. Chinen abrió sus ojos al ver que un auto se acercaba a toda velocidad.

-CUIDADO!!!! YAMA-CHAN!!

Se escucho un gran golpe, Yamada cayo al piso bruscamente, por un momento quedo inconsciente, los murmullos de la gente se comenzaron a escuchar haciendo reaccionar al mayor rápidamente, abrió sus ojos encontrándose a Chinen tirado sobre la carretera, Yamada como pudo corrió hacia el menor.

-Ya viene la ambulancia.

Dijo una señora tratando de calmar al menor.

-Chinen háblame..

Dijo Yamada tomando al pequeño entre sus brazos, el menor lo miro regalándole una débil sonrisa.

-Yama-chan estas bien?

-si, pero porque lo hiciste? porque me salvaste? porque??

Respondió Yamada comenzando a sollozar, chinen sonrió con debilidad.

-porque no quería perderte.. Prefiero morir yo a que algo te pase..

-No digas eso estarás bien..

Susurro Yamada derramando todas esas lagrimas mientras acariciaba con suavidad la mejilla del pequeño.

-no llores.. Yama-chan…. prométeme algo..

-no hables te hará daño, no te preocupes la ambulancia ya no tarda.

-Por favor promételo.

Pidió Chinen con debilidad, Yamada solo asintió.

-Si yo llego a faltar, no te olvides nunca de mi... mantenme con un lindo recuerdo.. pero... déjame ir.. se feliz.. no quiero que te aferres a mi.. yo siempre estaré a tu lado..

-no digas eso tu vas a vivir ya lo veras.

-prométemelo

Suplico una vez mas el menor, Yamada solo asintió llorando con mas fuerza, Chinen se sonrió leve, suspirando levemente callo inconsciente, Yamada se asusto mirando con desesperación el cuerpo del pequeño tratando de hacerlo reaccionar, no tardo mucho y la ambulancia llego, pronto subieron al menor e inmediatamente Yamada subió.

 Desde ese día que el menor cerró los ojos no los ha vuelto abrir cayendo en un estado de coma.

-Fin  del flash-

-Mi pequeño reacciona por favor... prometo cuidarte como debe de ser.. pero vuelve..

Acariciaba con suavidad la mejilla del menor, verlo tan débil y frágil le hizo nuevamente llorar no se explicaba porque Chinen y no el, quien estuviera allí.

Takaki caminaba de regreso a casa aun quedaban esos rastros de lagrimas, su piel estaba pálida, sus ojos ya no eran los mismos, lucían vacíos al igual que su corazón, tenia ojeras, su rostro lucia demasiado demacrado, si el estaba así no podía imaginarse como estaba  Yamada quien aun era mas joven que el y sobretodo era el novio de Yuri.

-Yuri.. se que no te hubiera gustado ver a la persona que amas sufrir por ti no es así?.. pero no se que hacer para que Yamada ya no sufra.. soy un idiota no puedo hacer nada.. para cumplir tu deseo..

Se dijo asimismo con debilidad, de pronto su celular comenzó a vibrar, sacándolo de todo pensamiento.

-Takaki-san ?

-si habla el

-Soy el papa de Yuri, necesito hablar contigo de algo muy importante.

-eh? hai salgo inmediatamente para allá.

Dijo Takaki con preocupación, corriendo inmediatamente, por un momento solo pensó que algo le había ocurrido al pequeño esperando lo peor.

Pronto el día siguiente llego anunciando con el un nuevo día, Yamada abrió los ojos mirando a su pequeño quien seguía igual, de pronto se oyeron leves golpes en la puerta.

-Adelante.

Dijo Yamada, la puerta se abrió de la cual entro Yuya mirando al mayor con preocupación.

-Yamada, luces muy mal ve a descansar o vas a enfermar, por favor hazme caso.

-No!! ya te dije que no me moveré de Chinen hasta que despierte!!

-Por favor ve a descansar, yo cuidare de mi hijo en el rato que no estas.

Se escucho una voz detrás de Yuya, el mayor miro aquel hombre sabia a la perfección que se trataba del padre del menor.

-pero..

-Por favor Yamada-kun, te agradezco que hayas estado cuidando de Yuri pero ve a descansar prometo estar con el en lo que regresas.

Yamada solo bajo la mirada y asintió, deposito un suave beso en la frente del menor.

-solo iré a tomar un baño, comeré algo y enseguida vuelvo.. por favor cuide bien de el..

Dijo Yamada haciendo una reverencia, el padre del pequeño solo asintió y enseguida Yamada salió de aquella habitación.

-esta seguro que es lo que desea?

Pregunto Yuya al ver al padre de Yuri quien tenía su débil mirada hacia su pequeño.

-si, es por el bien de Yamada-kun.

Unos minutos y Ryosuke llego a su casa por alguna extraña razón se sentía angustiado, algo oprimía su pecho.

-Chinen..

Susurro quedándose un instante de pie, antes de lograr entrar a su casa dio media vuelta y salió corriendo nuevamente al hospital, algo no andaba bien y Yamada lo presentía.

Llego agitado, su respiración era irregular, por un momento se detuvo frente al hospital, alzo su vista mirando aquel oscurecido cielo, al parecer iba a llover, sin motivo alguno lagrimas comenzaron a bajar de sus ojos, sus piernas comenzaron a temblar, un nudo se formo en su garganta, una extraña sensación de nostalgia acompañada con dolor lo invadió, sin esperar mas entro corriendo con ese extraño presentimiento de angustia, algo le decía que no volvería a ver a Chinen, porque siento que algo no esta bien? se pregunto llegando a la habitación de su pequeño, giro con la mano temblorosa esa perilla, toda ilusión murió cuando miro a Yuya llorando desconsoladamente a un lado de aquella cama vacía, acomodada perfectamente con sabanas blancas, porque no estaba Yuri? fue la primera pregunta que paso por la mente de Yamada no queriendo obtener una respuesta.

-donde esta Yuri?

Pregunto Yamada con la voz apagada, Yuya lo miro con debilidad, se acerco a el tomándolo por los hombros.

-Yamada cálmate.. esto tarde o temprano tenia que suceder..

-DONDE ESTA YURI!!!!

Grito Yamada desesperado al mismo tiempo que se soltaba del agarre de Yuya con brusquedad, corrió a su cama a buscarlo, bajo la cama, en el baño en cada rincón de la habitación mientras su rostro se comenzaba a llenaba nuevamente de lagrimas, Yuya lo miro con debilidad sabia que el menor esta sufriendo peor que el, había perdido a su amado.

Takaki corrió hacia el menor atrapándolo en un fuerte abrazo, Yamada trato de liberarse pero fue en vano comenzando a debilitarse.

-Yuri ya no esta con nosotros... el murió..

Yamada se quedo paralizado al escuchar esto, sus piernas comenzaron a fallar, sus ojos perdieron todo brillo quedándose completamente vacíos, su fuerza se agoto haciéndolo flaquear callo de rodillas al piso, mientras miles de lagrimas corrían por sus pálidas mejillas, un dolor oprimió todo su cuerpo, aquellas ilusiones todo su mundo se derrumbo en un abrir y cerrar de ojos, de un momento a otro todo se volvió borroso, cayendo inconscientemente, yuya lo tomo entre sus brazos, sabia que el menor estaba sufriendo pero lo cuidaría, perdió a chinen pero no dejaría que Yamada tambien se le fuera, lo tomo en brazos recostándolo, el cuidaría de el menor hasta que lograra superarlo.

Los días transcurrieron desde aquel incidente, Yamada se encontraba en estado de depresión, no hablaba con nadie, no había expresión alguna en su rostro, se ausento del mundo yéndose al propio, no había más sonrisas, ni llanto fue como si todo sentimiento hubiera muerto.

Yuya entro mirando al menor quien tenia su mirada hacia la ventana, desde aquel día el mayor lo había ido a visitar todos los días tratando de alegrarlo sin obtener algún resultado.

-Yamada sabes hable con el doctor y dice que mañana mismo te dará de alta.

Dijo Yuya tomando asiento en una silla al lado de la cama del mayor, quien lo miro con esa vacía mirada de siempre.

-me voy .

Dijo de pronto Yamada, por primera vez desdé aquel día el mayor había hablado, Yuya lo miro sorprendido.

-eh!

-me voy... me alejare de este país por unos años, no hay nada que me retenga, en estos días que han pasado me di cuenta que nada es un sueño, que es mi cruel realidad en la que el ya no esta a mi lado, quería creer que no era verdad mintiéndome a mi mismo... pero por mas que haga esto el no volverá..

-Yamada... tu..

-Gracias Yuya por ver todo este tiempo por mi, quizá hubieras sido mejor novio para el.. una vez me dijiste que el no volvería a regresar y tenias razón.. así que creo.. que es hora de que lo deje ir no es así?

Susurro esto último mirando a la ventana mientras nuevamente lágrimas caían por sus mejillas, Yuya solo asintió y lo abrazo suavemente.

Llego el día en que Yamada partiría, aunque Yuya le había estado suplicando que no se fuera que lo ayudaría a que lo superara, el menor no le hizo caso, lo mejor era alejarse de todo lo que le recordara a Chinen. Yamada se encontraba frente a la tumba de su novio, pidió a Yuya por ultimo que lo llevara a despedirse, a lo cual el mayor no se pudo negar.

-aquí dejo nuestras sonrisas, nuestros días juntos, todos aquellos recuerdos vividos, cada suspiro, cada lagrima, cada sonrojo, cada mirada, todo lo dejo aquí mi pequeño porqué solo serán tuyos, yo me iré pero no para olvidarte si no para lograr admitir que ya no volverás a mi, no te digo un adiós solo un hasta pronto, Te amo y eso no cambiara hasta que yo muera y quizá en otra vida volvamos a vernos, adiós mi pequeño amor..

Susurro Yamada depositando un beso en una rosa que la dejo encima de aquella tumba.

Yuya lo miro sabia que era lo mejor para el menor, quizá si se alejaba dejaría de sufrir, así que solo le quedo apoyarlo en esa decisión.

Después de varias horas subió a ese avión que lo alejaría definitivamente, de aquellos tristes recuerdos.

-es hora de partir, dejare atrás aquellos bellos recuerdos que viví a tu lado, aquellas sonrisas que solo te dedicaba a ti se quedaron enterradas junto con aquellas lagrimas, prometo regresar pero con una nueva sonrisa, no te prometo ser feliz porque no lo seré, pero seré fuerte para vivir una vida que te prometí aunque no sea a tu lado, adiós mi pequeño amor, es hora de dejarte partir..

Susurro Yamada embozando una débil sonrisa, ondeo su mano a Yuya que se encontraba no muy a lo lejos y sin mas subió aquella avión que lo llevaría a comenzar una nueva vida sin su pequeño Yuri.

Yuya miro tristemente partir al menor, sin nada mas que hacer se dio media vuelta, sintiendo su celular vibrar.

-Moshi moshi

-Takaki-kun-

-Sr. Chinen que pasa?

-te tengo una grande noticia!!! Yuri.. Yuri ha reaccionado!!!! después de largo tiempo ha reaccionado y pide ver a Yamada-kun!!

-Que!!!! Yu...yuri ha reaccionado!!!!

-si, impide que Yamada-kun se valla!

-no puedo hacer nada la avión ya partió!, voy para allá.

Termino con la llamada, por un lado se sentía feliz pero por otro se sentía tan culpable, pero el no sabia que Chinen reaccionara después de tanto tiempo, suspiro con debilidad.

-creo que lo mejor es que le diga a Chinen, el me tendrá que decir que debo hacer

Susurro para si mismo al mismo tiempo que subía a un taxi, pero como fue que llego hasta la conclusión de decirle a Yamada que Yuri había muerto.

-Flashback-

Yuya llego a la casa de Chinen donde el padre del menor lo invito a tomar asiento en la sala.

-dígame que pasa? le ha pasado algo a Yuri?

Pregunto un preocupado Yuya, el señor lo miro con seriedad.

-no te preocupes mi hijo sigue igual, por eso quiero hablar contigo ya que eres un gran amigo de Yuri, como te has fijado Yamada esta sufriendo mucho, me duele verlo así, se que quería mucho a mi hijo y eso se lo agradezco mucho por eso, quiero lo mejor para ese muchacho, hable con el doctor preguntándole si valía la pena esperar por Yuri, y el me respondió que no había esperanzas, y que lo máximo que lo podían mantener conectado a esos cables era por dos semanas mas, me reúse pero no pude hacer nada, por eso he tomado la decisión de traer a Yuri a su casa, aquí lo mantendremos conectado hasta dar lo ultimo que este en nuestras manos, aquí estará porque esta es su casa y esperaremos hasta que despierte, soy su padre y me duele rendirme por eso esperare el tiempo que sea necesario agotando todas las posibilidades..

Dijo el Sr. Chinen esto último con la voz quebrada, Yuya comprendió tratando de darle ánimo y un poco de calma.

-piensa decírselo a Yamada.

-eso es de lo que te quería hablar, Yamada-kun ha sufrido bastante y le agradezco que todo este tiempo haya estado al lado de mi hijo, pero creo es hora de que sea feliz, que haga su vida nuevamente y se olvide de Yuri, no deseo que se haga una esperanza que tal vez nunca llegue.

-y como le hará para que Yamada no se entere?

-por eso quiero que me ayudes... hare pasar a mi Hijo como si hubiera muerto.

-Que!! pero.. eso destrozaría a Yamada..

-lo se.. pero es la única forma.. se que con el tiempo ello superara… por favor entiéndeme es por el bien de ese muchacho..

Yuya lo analizo mejor y quizá eso era lo mejor, ayudaría a que sacarán a Chinen de esa habitación haciéndole creer a Yamada que había muerto, iba a ser una mentira cruel pero eso era lo mejor.

-cuente con mi ayuda-

Dijo Yuya con seguridad, el padre del menor solo sonrió.

-fin del flash-

Yuya entro a la casa de Chinen corriendo como podía, llegando a la habitación donde miro al pequeño recostado, y con su papa a un lado.

-Yuri...

Dijo Yuya sonriendo al mismo tiempo que comenzaban a bajar lágrimas de sus ojos, sin esperarlo mas corrió abrazar al pequeño.

-Yuya..

Dijo el menor correspondiendo al abrazo, Yuya sonrió abrazándolo con fuerza.

-Yuri perdóname .. Por mi culpa Yamada se fue..

-no es tu culpa... no te preocupes.. mi padre me ha contado todo..

-eh?

-creo que es hora de que el sea feliz, por mi causa el ha sufrido mucho y si el se ha despedido de mi... debe de quedarse así.... no puedo ser egoísta con la persona que mas amo..

-Susurro Chinen bajando la mirada, Yuya lo miro sorprendido y solo asintió con debilidad.

-si así lo quieres, sabes que siempre estaré a tu lado apoyándote.

Susurro Yuya llorando débilmente, chinen lo miro regalándole una débil sonrisa, aunque estuviera muriéndose por dentro ya no deseaba causarle mas dolor a la persona que tan feliz lo hizo, era hora de dejarlo ir.

-Dos años después-

Después de tanto tiempo había regresado al lugar que una vez fue su hogar, al lugar que tanta nostalgia le causaba, el lugar donde rio, fue feliz, pero tambien el que causo su dolor, en el que lloro como nunca, donde conoció el amor pero tambien donde lo enterró, así los años pasaran nunca lo olvidaría, pero gracias a esos dos años se distrajo, por fin había superado lo del menor.

-Nuevamente aquí.. es hora de comenzar de nuevo pero sin ti..

Susurro Yamada con una débil sonrisa, ya no había dolor pero si la nostalgia y el recuerdo que siempre iría con el.

Yamada tomo un taxi y se dirigió a su casa, miraba aquellas calles trayéndole hermosos y bellos recuerdos, habían cambiado pero no mucho, una débil sonrisa se formo en sus labios mirando a la ventana.

-todo ha cambiado excepto yo... aun te sigo amando de la misma forma mi pequeño..

Susurro Yamada con debilidad, rodando una lagrima por su mejilla. De pronto comenzaron caer copos de nieve, Yamada se sorprendió, hace mucho que no veía nieve.

-Es.. esta nevando...

Susurro Yamada sin despegar la vista del vidrio, el taxi se detuvo por unos minutos gracias a el semáforo que anunciaba luz roja, de pronto su mirada se quedo posada en aquel parque, ese lugar donde se la pasaba todo el tiempo con su pequeño, donde pudo visualizar dos personas de espaldas que miraban al cielo, una la mas bajita se parecía tanto a su pequeño.

-Yuri.. se que sonara tonto pero no he podido olvidarte... aun puedo verte..

Susurro Yamada, posando su mirada en aquel bajito chico, que tenía el rostro hacia el cielo mientras la nieve chocaba con su rostro, sonrió con debilidad al notar lo tonto que se estaba comportando al imaginar a su pequeño.

Pronto el semáforo dio luz verde y el taxi comenzó avanzar, Yamada aun tenia la vista hacia aquellos chicos esperando que voltearan por alguna razón se le hacían familiares, quienes se miraron tomándose de las manos, girándose para irse, así por fin Yamada logro ver sus rostros, quedándose sin aire al instante, su rostro se puso pálido, su cuerpo comenzó a temblar, sus ojos se abrieron de par haciendo a su corazón latir con rapidez, si no se equivocaba uno de ellos era Takaki y la otra persona, se parecía demasiado a Chinen, como pudo logro hablar.

-detenga el auto.

Dijo Yamada desesperado, sin despegar la vista de ellos quien se alejaban cada vez más.

-eh? pero..

-QUE DETENGA EL AUTO DIJE!!!!

Grito un desesperado Yamada, el chofer se asusto deteniéndolo al instante, sin mas se bajo comenzando a correr, hacia la dirección de ellos, lagrimas comenzaron a bajar en su rostro, su corazón volvió a tener  esa esperanza, esa ilusión que se perdió hace dos años.

-YURI!!!!!

Grito con todas sus fuerzas, corriendo hacia ellos, quienes se detuvieron al escuchar esa voz.

-Yama-chan..

Susurro Chinen estremeciéndose al instante sin voltear. Yamada respiraba agitado, sus lagrimas no paraban de bajar se sentía ansioso, feliz, triste, emocionado por que ese chico volteara y le diera esa esperanza, esa luz que tanto buscaba nuevamente.

Una nueva esperanza se formaba muy dentro, quería hacerse la idea de que ese hasta pronto llego, quizá el destino jugo con ellos separándolos, pero quizá solo quizá los volvería a unir.. pero si era así esta vez no lo dejaría ir..

Fin..

Espero les haya gustado :3